Enigma De La Eufonía

Que si precisas tu descripción o una manera frívola de susurrarte en desglose solo tendría la opción de compararte con la manipulación del chocolate entre estos labios que te saborean desde lejos.

O necesitaría un par de miles y más aún de colores, sentimientos, sensaciones y aromas para acercarme al envolvente hechizo que te acontece desde tus raíces que me embriagan de ilusión.

Porque eres el susurro anhelado, inesperado, sutil y transparente con aquella fuerza de gigante que corre por sí solo entre mis venas, aquel que esperaba sin reconocer y anhelaba sin usar la torpe razón del desespero.

Y así llegaste como resplandor de mi mente a proyección, sujetándome en la retorcida de tu sonrisa al segundo de tu parpadeo y a ese halo intoxicante de armonía que aparece en la cotidianidad de tus estrellas fugaces.

Mi luciérnaga palpitante inquieta de sueños enloquecidos, solo se que vos sos el roce extravagante lleno de adrenalina en almíbar con quien pretendo seguir flotando en este suspiro compartido.